El otro día Yukita decidió que el Guille ya tenía edad pa irse de birras y se lo llevó al Ca Beleño de foryú. Y allí estuvimos Bego Ana y yo de cháchara y el peque sobando como un bendito, comiendo lo que le daban y disfrutando de la música ambiente. En fin, que desde entonces el Guille está creciendo a marchas forzadas y dice la mami que ya ha reventao los corchetes de cuatro bodis y que el pijama de la foto le queda de bombacho. Pos fale.
Por acá la Eli ha revisitao las listas definitivas del acceso a la uni y se ha encontrao en segunda posición, ahí, en la puritita cima, codeándose con los empolloncetes de turno y presumiendo de haberse preparao el examen en un mes -en el que además de currar nos fuimos unos días a esquiar (a Andorra, pa reducir el estrés, ya os podéis imaginar). En fin, que ahora sí que está estresada decidiendo qué quiere hacer. Después de valorar enfermería, descartar medicina y entusiasmarse con terapia ocupacional los últimos sondeos parecen apuntar a fisioterapia como la opción a tener en cuenta. Seguiremos informando.
Por otros lares los papis están recién llegaos a los estates, Amir camino de Beirut, Bertasuel redescubriendo Barcelona, Antonio que da señales de vida (visitar su página web; una auténtica chulada!) y Ana Ruiz y Eduardo que siguen salvando vidas en Mozambique; total, que la peña se nos está volviendo viajera mientras nosotros seguimos paseando de Lugones a Arriondas... y viceversa.
Pues ala, a seguirla disfrutando!
pd. Saludos al Rai que está de vuelta con su circo para-sanitario particular, aguantando estoicamente el chaparrón de estupideces injustificables de una pandilla de impresentables en busca de la pela fácil a costa de quien sea. La primera sesión de esta segunda ronda (esperemos que sea la definitva) parece haber salido bien aunque aún quedan días tontos. Ánimo Rai!